No tener miedo, por que no te puedes sentir peor. Tener un apoyo incondicional en un desconocido, jugártela así por alguien, solo pasa en las películas, en la vida real, no encontrarás a nadie así incluso pidiéndolo. Los hombres ya no tienen cojones. Y tú ya no tienes ganas, y te derrumbas. Pero aún queda mucho tiempo, mucha vida, muchas experiencias y mucha adolescencia.
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Una vez que tu idea pasa por la cabeza tienes dos opciones; la fácil, lanzarse, hacerla y saltar el precipicio, esa pequeña adrenalina, respirar, y ese nuevo despertar o la difícil. Que esa idea se quede en tu mente, ver los pros y los contras en milésimas de segundos y tener los cojones de realizarla, a sabiendas del peligro que conlleva.
Te aconsejo que el truco, funciona.
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