Salvaje y natural

sábado, septiembre 3

Ves ese idiota de ahí ¿? Le amo.


Pero ya no, con mi tendencia innata de olvidar todo lo malo me voy a olvidar de mí, voy a dejar cabos sueltos, voy a hacerme sufrir. Cuando no lo pueda soportar más llamaré a tu puerta, y llorando se que me perdonarás, por que me quieres, por que te gusto. Mientras, tengo el dolor en mis manos, por que chaval, Eh, aqui estoy, otra noche fumando sin dormir. 



Sigo llorando, igual que anoche. Y que la noche anterior, y la semana pasada. Quizás me este volviendo una niñata sentimentalista, sabes que no es mi estilo, yo soy mas tipo zorra sin escrúpulos. Pero no se que me pasa, ni que te pasa a ti, ninguno de los dos lo sabemos. Todos los días me pregunto como sigo aqui, y pienso que sobrevivo por pura ansiedad. Entonces empiezo a recordar el porque de las cosas; empiezo a recordar que fumo porque me hace sentir la misma sensación que al rozar tus labios, y eso, creeme, es como rozar la felicidad.



Recuerdo que no duermo para poder mirar amanecer y poder observar algo parecido a tu jodida y estúpida perfección. Eres asqueroso. Eres un imbécil, un capullo. Te crees guay por sacar musculitos y tener una cámara Canon. Te ríes de mi, de mi pelo y me llamas loca. Escuchas música rara. Pero sabes que? Que si me dijeran que no ven la perfección de tus ojos les diría que no tienen ni puta idea de la belleza. Y si me dijeran que nunca han rozado tu piel, les diria que no saben lo que es la felicidad en su estado mas puro.



Porque te quiero, te necesito, y eres mi puta vida, subnormal egocéntrico.




No hay comentarios:

Publicar un comentario