L.T.

-Estaba nerviosa desde que se levantó esa mañana, aún que esta historia empieza a las 4 de la tarde de un día muy poco soleado de principios de septiembre. Ese día en el que ella, egoístamente seguía viviendo en un cuento fácil de llevar pero del que no debia ser protagonista,no iba con ella. Era una historia realmente de película,,y tan triste como que lo tenía todo sin quererlo, o quererle...Aun así fue. Se encontraron 15 minutos antes de las 4, siendo fácil pensar que tenían ganas de verse, presos de la ilusión.
Nada más verse, se saludaron y aceleraron el paso.
-Hola preciosa, ¿como estas ?-dijo sonriendo
-Hola -respondió ella
-Jaja..anda, ven aquí.. - y con esa frase se acercó a ella para besarla.
Pasaron varios minutos cuando decidieron irse a pasear hacia el puente,ya que querían saltar.
Fueron hasta el final, cerca de la playa dejaron sus cosas y se desnudaron. La chica del bañador azúl, y él fueron haciendo el tonto y dándose besos hasta llegar a la varandilla, donde ella se asustó de repente.
El día era realmente frío, aún que no se percataran ni estando con poca ropa, los 2 agarrados para no caerse al mar picado de aquel dia. Ella le dijo que tenía miedo, pero que a la de 4 saltaban..cosa que indiscutiblemente no ocurrió. Así que él, como siempre tomó la iniciativa, pero se arrepintió al momento, querían hacerlo juntos, se puso delante de ella se agarró en la varandilla helada de hierro, a la altura de su cintura y le besó sin que ella puediera resistirse, y dejándose llevar empezó a soltarse y a tocarle a él, olvidando donde se encontraba, entonces el le susurro al oido, uno, dos, tres , cuatro y..uuuaaaaaaaaaaaaaa! sin soltarse de la mano cayeron al agua, tan congelada como se habían imaginado que estaría. Los dos juntos, besandose abrazados, intentando flotar, hasta que subieron, y se dieron cunta de que llovía,,una gota le cayó en la nariz, otra en la mejilla, y de repente muchas más..Nadaron juntos, parándose, jugando, hasta la orilla donde acostados siguieron besandose. Con tanta intimidad, en un sitio tan bonito siguieron con besos, y más, el cuello, en la barriga en la espalda..más en serio, el se acercó a ella y le susurró..:
-Eres mía y.. te quiero - Fué un momento precioso, dulce, romántico donde ella aprovecho el momento al máximo y a punto de atreverse,,se dió cuenta de que ya no le gustaba..